Capítulo 15: “En ese caso debería hacerlo yo, ya que es mi invitada”, se mete Jack. “La diferencia es que tú bajas las escaleras y llegas a tu trabajo”, el tono burlón de Zeus hace que Jack arrugue la nariz. “En cambio, yo debo ir hasta el otro lado de la ciudad y de camino puedo pasar a dejar a la reina de la cocina… ¡Tienes que prometerme que esta receta estará en mi restaurante!”, agrega. “Cuenta con ello y sí, me iré contigo, tienes razón, queda de camino y así me evito a los pervertidos del autobús”, le dice. “¡¿Cómo que pervertidos?!”, dice Jack tirando sus cubiertos en el plato y llegando al lado de Luna en un segundo. “¡Oye, cálmate! A mí nunca me ha pasado en el transporte, pero sí he visto como a algunas mujeres las han tocado y hasta grabado, por supuesto que siempre los terminamos exponiendo y sacando del vehículo, pero no deja de ser desagradable”, dice Luna. “No pondrás un pie en el transporte público nuevamente…”, ordena Jack. “¿Y cómo se supone que me moveré por la ciudad? Porque automóvil no tengo y menos me alcanza para pagar taxi”, espeta Luna. “Te pondré un chofer hasta que aprendas a manejar y te entregue un auto sólo para ti”, dice Jack como si eso fuera de lo más normal y ella se cruza de brazos. “Las cosas no funcionan así. Además, yo ya sé manejar, tengo hasta mi licencia”, dice Luna. “Bien, hoy mismo tendrás un auto”, exclama Jack. “¡No quiero!”, Luna se pone de pie y deja la servilleta sobre la mesa. “Entiende, agradezco mucho que me dejes quedar aquí, sólo hasta que encuentre algo donde vivir, pero eso no quiere decir que tenga que aceptar todo tu estilo de vida”, dice Jack. “Nací pobre, soy sencilla en mi estilo de vida y no cambiaré jamás, así que seguiré movilizándome en el transporte público”, mira a Zeus con una sonrisa amable. “Te agradezco la oferta, pero me iré en el transporte público”, agrega con un poco más de calma. Sale de allí muy molesta directo a su habitación para terminar de alistarse, Zeus mira con el ceño fruncido a su amigo y mueve la cabeza con desaprobación. “En serio te pasas”, le dice. “Sólo quiero que viaje más cómoda y segura”, dice Jack. “Esa no es la solución, presionarla para que haga lo que quieres ni mucho menos para impresionarla, te dije que Luna no es así. Ella es una chica sencilla y que tiene valores que no le permiten ostentar a algo que no se ha ganado”, comenta Zeus “Debería ser menos orgullosa”, dice Jack. “Te equivocas, Jack, no es orgullo, eso que acabas de ver se llama dignidad. Luna jamás va a aceptar las cosas fáciles, deberías saberlo… esa es la principal razón de que no aceptara tu propuesta en primer lugar. Por muy desesperada que esté, jamás va a tranzar sus valores, su dignidad”, espeta Zeus. Zeus se pone de pie y se va a alistar también para ir a trabajar, dejando a Jack aprendiendo una gran lección y haciendo una nota mental que debe aprender silenciosamente de su amigo cómo conquistar a Luna, porque tal parece que esa es la única manera de obtener lo que quiere de ella. Jack se pasa todo el día entre reuniones y detalles que afinar de los proyectos que tiene en la fila de espera. Aun así, no hay un solo minuto en que no piense en Luna y la manera de hacer que se enamore de él, para así poder manejarla a su antojo y lograr su objetivo. Por una extraña razón termina buscando por internet algún detalle para sorprenderla y encuentra lo que para ella sería algo sencillo, para no terminar espantándola. “No puedo creer que termine haciendo lo que nunca hice por ninguna y siquiera es para tener se%o”, comenta. Está frustrado, pero no está en lugar que tiene por dejarse vencer, así que todo su plan de conquista comienza desde ahora mismo. En cambio, el día de Luna se pasa entre sus clases, absolutamente concentrada en aprender. Luego de una jornada bastante educativa y productiva, sale de la universidad para tomar el autobús e ira su trabajo. Al llegar, le informan que Zeus la está esperando en la oficina y ella va directamente a ver qué es lo que necesita, pensando en que tal vez se siente algo ofendido por lo ocurrido en la mañana. No quería despreciar su detalle, pero se sintió abrumada entre los dos hombres, que pareciera están compitiendo por ella como si fuera un objeto, sin tomar en cuenta lo que ella quiere. Con toques suaves en la puerta anuncia su llegada y por supuesto, el hombre la hace entrar enseguida. “Me dijeron que estabas esperando por mí”, le dice con suavidad y muy nerviosa, pero al ver la enorme sonrisa de Zeus se relaja un poco. “Si, quería hablar contigo para hacer un cambio de horarios”, le indica el sofá para que se siente. “Zeus, sabes qué estudio y los cambios de horario podrían afectarme…”, empieza a decir ella nerviosa, pensando en que quiere otros horarios, pero él la interrumpe negando con la cabeza. “Precisamente por eso quiero cambiar tus horarios. Acortaremos una hora tus jornadas de ahora en adelante”, afirma Zeus. “Por favor, no lo hagas, ¡Sabes qué necesito ese dinero!”, dice Luna. “Yo sólo dije que acortaría tus jornadas, nunca dije de la paga”, responde con esa sonrisa calmada y Luna frunce el ceño porque no entiende, Tu salario por hora aumentará para que sigas ganando lo mismo. “Zeus, no quiero que me ayudes de esa manera, me hace sentir incómoda… por favor, no seas como Jack”, pide Luna. El hombre sonríe mostrando sus blancos dientes por la preocupación de Luna, se pone de pie y se acerca a ella para tomarle las manos. La mira fijamente al rostro y le dice, con mucha calma. “Jamás haría eso. Sólo no quiero perjudicar tus estudios porque sabes cuál es mi interés real en ti trabajando para mí. Como alguien que está invirtiendo en su futuro, quiero ayudarte a que puedas seguir pagando tus estudios, tanto la cena como el desayuno me encantaron y sé que, si tú te haces cargo de mi restaurante, podrás ser una de las mejores chefs de la ciudad y yo el dueño de los mejores restaurantes de Seattle”, espeta. “Me halagas con esa confianza”, le dice ella emocionada. “Más que confianza, diría que estoy viendo en ti el potencial que hay. Prefiero acortar tus jornadas y mantener tu salario, para que puedas seguir preparándote y seas mi chef exclusiva, no quiero que trabajes en ningún otro lugar que no sea conmigo ni mucho menos te preocupes por tu futuro laboral”, dice Jack. “Es más, ya comencé con el diseño de la cocina y la expansión del bar para poder tener un espacio familiar. Todo lo que te he dicho acerca del restaurante y de ti trabajando conmigo ha sido en serio”, ella lo ve con los ojos abiertos por la sorpresa y Zeus sólo sonríe. Finalmente, Luna acepta el cambio, le agradece a Zeus por el apoyo con un fuerte abrazo, el que se siente incómodo luego de besarse el otro día, pero Zeus no la presiona para nada más. Luna se va para cumplir con su jornada de trabajo, la que resulta ser bastante tranquila, tal vez porque es mitad de semana. Al terminar, se despide de sus compañeros y el transporte que Zeus ha puesto para ella la está esperando. A él no ve y le cuentan que está ocupado en una reunión de trabajo, por lo que se va sin despedirse, ya lo verá en el departamento de Jack por la mañana. Al llegar al edificio camina al ascensor que esta vez llega directamente al departamento. Al menos, no debe pasar por la oficina de Jack para poder subir y piensa que con eso evitará la presencia del hombre, pero en cuanto cruza aquellas puertas de vidrio que sirven de recibidor, se da cuenta de que él ya está sentado en la sala leyendo con el ceño fruncido. “Buenas noches”, le dice ella con educación y camina directo a su cuarto, él la mira con seriedad, al menos parece de buen humor. “Ordené que te dejaran la cena en el horno por si querías comer al llegar”, comenta Jack. “Gracias, muero de hambre, pero primero iré a cambiarme de ropa y luego vendré a comer”, responde Luna. Luna deja sus cosas ordenadas en el cuarto, se coloca aquel pijama feo, sale a la cocina con el cabello suelto y descalza. Jack intenta no mirarla cuando la oye llegar a la cocina, por Dios que en verdad lo intenta, pero no puede. Title: A Match Made in Heaven In "A Match Made in Heaven" by CrushReels, a spontaneous decision leads to an unexpected twist of fate. What begins as a flash marriage to a street vendor unravels into the revelation that he is, in fact, a billionaire CEO. The story follows a wealthy heiress who finds herself lost and betrayed by those closest to her, navigating through deceit and the dark intentions of others. As she grapples with the aftermath of betrayal by her boyfriend and the unsettling proposition from her foster parents to be sold off to an older man, our protagonist faces challenges that test her resilience and character. Amidst the chaos of her circumstances, she discovers an unlikely connection with the street vendor turned CEO, leading to a journey of self-discovery and unexpected romance. Set against the backdrop of modern romance, this ongoing tale delves into themes of trust, redemption, and the complexities of human relationships. "A Match Made in Heaven" stands out for its unique blend of serendipity and intrigue, offering readers a captivating narrative that defies conventional expectations. Experience the unfolding saga online at CrushReel and delve into a world where chance encounters pave the way for extraordinary love stories.