Capítulo 13: “Segundo… tengo gente que prepara la cena para mí y tú eres mi invitada”, sisea esta vez mirando a Luna. “Sí, pero soy una invitada que se puede atender sola perfectamente”, le dice con suficiencia y Zeus quiere reír por la cara de amargo de su amigo. “Además, nunca me ha gustado que otras personas hagan cosas por mí. ¿Ves esto? Son mis dos manos perfectas y capaces de hacer muchas cosas”, agrega. Luna avanza hacia la cocina como si fuera la dueña del lugar, Zeus se ríe bajito, mientras que Jack no sabe qué hacer; si echársela al hombro y encerrarla en su cuarto por insolente o aplaudirle su valentía de desafiarlo en su propia casa. “No creo que pensaras muy bien el traerla a casa”, le dice Zeus con seriedad y mira a su amigo. “Ella es frágil, pero con un carácter fuerte por lo que veo”, agrega. “Esa enana perversa me dio una bofetada el día que la conocí”, dice Jack. Zeus deja caer la mandíbula por la sorpresa. “Sólo por eso le tengo un poquito de consideración”, añade. “Es perfecta”, dice Zeus con un suspiro mientras la observa moverse por la cocina. “¡Espero que los macarrones con queso sean de su agrado!”, dice contenta, sin oír la conversación de los hombres. “¡Por mí está bien!”, dice Zeus caminando a la cocina, mientras que Jack sólo gruñe más y se va a su despacho porque debe hacer algo del trabajo, pero también porque necesita hacer una llamada urgente. En cuanto se encierra en el despacho, llama a su asistente y le ordena con los dientes apretados por la rabia. “Tienes diez minutos para averiguar si es verdad que se rompió una tubería en casa de Zeus y que se tardarán varios días en reparar todo”, pide Jack. “Sí, Señor”, le responde. Se sumerge en el ordenador para terminar pronto, porque no quiere dejar a Luna sola con Zeus por mucho tiempo. En menos de diez minutos su asistente lo llama. “Anish”, dice Jack. “Es verdad, Señor. De hecho, el daño afectó a los dos departamentos aledaños del Señor Messina, aunque no tan severamente como el de él”, comenta Anish. “Busca al mejor contratista de la ciudad para que se haga cargo de las reparaciones, eso debe estar listo en menos de una semana”, ordena Jack. “Me temo que eso es imposible, porque hay un permiso que se tarda como mínimo cinco días…”, dice Anish. “¡Pues paga, soborna, lo que sea! Que el bendito permiso salga antes de cinco días”, espeta al final Jack. Cuelga el teléfono con molestia y lo mete en el cajón de su escritorio, Se pierde en el trabajo como suele hacerlo, pero esta vez lo hace un poco más rápido. Al final, como sólo le queda revisar las nuevas propuestas de comidas preparadas para una línea nueva de congelados, pasa la información a su iPad y se va a la cocina. Cuando llega allí abre mucho los ojos y se queda helado al ver la escena. Zeus baila con Luna, mientras esta se ríe. Lo hacen a un ritmo latino que a Jack le parece demasiado alegre para su gusto, pero los dos parecen disfrutarlo. “¡Jack!”, le dice Zeus alegre. “Vamos, únete, Luna me está enseñando a bailar salsa”, agrega Zeus. “¡Eso no es cierto!”, Luna está sonrojada por el ejercicio y sonríe feliz. “Yo no sé bailar, pero no niego que me divertí”, admite. Se aparta de Zeus y sigue preparando la cena. El hombre rodea la barra y se sienta, invita a Jack para que se una a él, Los dos se quedan mirando a Luna moverse por ese lugar, hasta que ella cierra el horno y se voltea, no puede evitar bajar la mirada porque la intimidan un poco. “¿Qué es eso?”, le pregunta Zeus a Jack, para no seguir incomodando a Luna. “Trabajo”, responde. “Sé perfectamente que es trabajo, no podrías estar haciendo otra cosa, pero quiero saber qué específicamente”, insiste Zeus. “Es una nueva línea de alimentos, estamos buscando nuevas recetas para incorporar a la comida congelada y…”, Luna le quita el ¡Pad y frunce el ceño. “Quiero ver”, pide. Zeus suelta una risita burlona y Jack vuelve a quedarse con esa expresión de asombro. “Tal vez deberían buscar alternativas no artificiales para la preservación de los alimentos y reducir la cantidad de sodio”, le entrega el iPad y se sienta frente a ellos. “Hay condimentos que, si se juntan, pueden ayudar a reducir el uso de la sal, por ejemplo”, agrega. “Eres experta”, sisea Jack y ella sonríe con sarcasmo. “Para eso estudio, Señor mal genio”, dice ella. Jack va a protestar, pero su asistente llega allí y Jack sabe que tiene algo importante que decirle. Se van al despacho, mientras que Zeus se queda allí con Luna hablando de cosas de cocina. Cuando Jack regresa, Luna saca los macarrones del homo, lo deja reposando y manda a los hombres a colocar los cubiertos y resto de cosas que necesitan para la cena. “¿Quieres que haga lo que el servicio hace por mí todos los días si se me da la gana?”, Luna se para con las manos en la cintura y lo enfrenta. “Oye, tienes dos manos que sirven, úsalas”, le entrega los cubiertos, lo gira y lo empuja hacia la mesa. Zeus ve la interacción entre los dos, es fuego puro. Pero él no cederá en su plan de conquistar a Luna, porque la chica en verdad le interesa para bien… no por nada el mismo dañó la tubería para tener la excusa perfecta, aunque le costará miles de dólares, una mujer como Luna vale eso y mucho más. Luego de limpiar y ordenar la cocina, Luna se despide de ambos hombres y se va a su cuarto. Una vez allí deja salir un suspiro largo y cansado, camina para buscar sus cosas, pero se da cuenta de que todo está perfectamente ordenado. Podrías hacerlo todo de nuevo ella misma, pero no tiene sentido. Revisa el correo de la universidad para ver si hay algún cambio en el itinerario o alguna tarea de último minuto, pero no hay nada. Arregla la ropa que usará al día siguiente, se mete a la ducha y se coloca su pijama feo de siempre, quiere sentirse lo más posible como si estuviera en casa. Sólo espera que el trabajo con Zeus le permita seguir pagando la universidad desde el próximo año y también poder rentar un departamento sencillo en un punto medio entre sus estudios y su trabajo. Tras secarse el cabello, se mete en la cama y se queda mirando la tela que cubre la cama, pensando en los dos machos alfa con los que le tocará pasar esa noche. Zeus es lindo, risueño, comedido, muy empático y caballero, en cuanto a lo físico no está nada mal. En cambio, Jack es odioso, serio, cruel, sarcástico e indolente, le importa un pepino los sentimientos de las personas, se cree el dueño del mundo y cada vez que la mira parece que quiere matarla, en lo físico tampoco está mal… pero con todos esos defectos la atrae más que Zeus y eso sólo le dice que está loca. Abraza la almohada cierra los ojos y se deja llevar por el sueño que siente en ese momento, Son tantas noches durmiendo poco o nada, que estar en un lugar diferente y acompañada la hace sentir segura. En la sala, Zeus está viendo la televisión, coloca el canal financiero porque no hay otra cosa que le interese en este momento. Jack parece abstraído en las propuestas para la nueva línea de congelados, sin embargo, cuando Zeus se pone de pie para ir por un vaso de jugo, este le pregunta sin levantar la mirada de la pantalla. “¿Qué interés tienes en ella?”, pregunta Zeus. “¿Disculpa?”, dice confundido Jack. Zeus cree imaginarse la pregunta de su amigo, porque él no suele ser así. Quiero saber cuál es tu interés en ella, aunque me imagino que el de llevártela a la cama”, dice Zeus. Title: A Match Made in Heaven In "A Match Made in Heaven" by CrushReels, a spontaneous decision leads to an unexpected twist of fate. What begins as a flash marriage to a street vendor unravels into the revelation that he is, in fact, a billionaire CEO. The story follows a wealthy heiress who finds herself lost and betrayed by those closest to her, navigating through deceit and the dark intentions of others. As she grapples with the aftermath of betrayal by her boyfriend and the unsettling proposition from her foster parents to be sold off to an older man, our protagonist faces challenges that test her resilience and character. Amidst the chaos of her circumstances, she discovers an unlikely connection with the street vendor turned CEO, leading to a journey of self-discovery and unexpected romance. Set against the backdrop of modern romance, this ongoing tale delves into themes of trust, redemption, and the complexities of human relationships. "A Match Made in Heaven" stands out for its unique blend of serendipity and intrigue, offering readers a captivating narrative that defies conventional expectations. Experience the unfolding saga online at CrushReel and delve into a world where chance encounters pave the way for extraordinary love stories.