---- Capítulo 13 Sofía fue trasladada a la cama contigua a la de Diego, donde él podía verla con solo girar la cabeza. Cada día se sentaba junto a su cama, trazando una y otra vez sus cejas y ojos con la punta de los dedos. - Sofi, ya me he encargado de quienes te lastimaron. -Podrias abrir los ojos y mirarme, por favor? Sofía no mostraba ninguna respuesta en su cama de hospital. Mientras tanto, los hermanos Mendoza, expulsados vergonzosamente de los círculos sociales de alta sociedad, atravesaban momentos difíciles. Anteriormente, Luciana había trabajado como modelo para la compafiía de los Martínez gracias a su relación con Diego, y había conocido a algunas personas influyentes. Pero como acostumbraba a manipular con palabras falsas, apenas había cultivado amistades sinceras. Ahora que Diego había dado la orden, no solo había perdido su trabajo y hogar, sino que se había convertido en una paria social. ---- En cuanto a Miguel, no había mucho que decir: era un inútil sin educación ni habilidades, prácticamente igual a cualquier vagabundo desempleado antes de relacionarse con Diego. Aunque habían perdido su estatus, no abandonaron sus hábitos de derroche, y pronto agotaron todos sus ahorros. Antes vivían en una mansión que Diego les había proporcionado; ahora, con la casa recuperada, se veían obligados a vivir en un apartamento de alquiler de menos de treinta metros cuadrados. - "Todo por culpa de esa maldita Sofía que ni siquiera tuvo la decencia de morir. Ahora no tenemos ni un centavo, ni podemos encontrar trabajo. iáQué vamos a hacer? -se quejaba Miguel amargamente. Luciana frunció el cefio, pensativa, y luego mostró una sonrisa maliciosa. - Tengo una idea. Poco después, un canal de transmisión en vivo se volvió viral en toda la red. Eran dos hermanos: el hombre parecía abatido y fracasado; la mujer, desconsolada y frágil. ---- Luciana Iloraba desconsoladamente frente a la cámara: - Buuuaa, amigos, díganme si esto es justo.. - Mi novio ya estaba conmigo, pero sigue pensando en su ex novia. - Ahora me ha echado de casa por ella, incluso ha perjudicado a mi hermano. Nos han quitado nuestros trabajos. éQué podemos hacer? Se presentaba como una víctima desvalida, echando toda laculpa a Sofía. Pronto su historia se volvió viral, con muchos internautas desinformados apoyándola en la sección de comentarios. Algunos incluso expusieron la información personal de Sofía, atacándola públicamente. Viendo el alcance de su campaíia, Luciana sonrió satisfecha en secreto. Pero al momento siguiente, vio cómo la sección de comentarios quedaba completamente en blanco. Su transmisión se cortó instantáneamente, y al mismo tiempo, alguien llamó a la puerta. Miguel palideció de inmediato: - Qué está pasando? ---- Justo cuando intentaba echar el cerrojo, la puerta fue derribada y un grupo de guardaespaldas irrumpió en el apartamento. Diego apareció entre ellos, con el rostro frío, mirándolos como si ya estuvieran muertos. -PDi... éDiego? - Luciana casi se muerde la lengua del susto. Al ver la expresión aterradora del hombre, corrió hacia él y se arrodilló suplicando: -iYo, yo fui obligada! Sefialó a Miguel, con odio en la mirada: - Él me obligó, dijo que así podríamos ganar dinero y recuperarte. - Todo fue culpa suya, iyo soy inocente! iYa que Miguel no la había ayudado la vez anterior, no podía culparla por ser despiadada ahora! Miguel, sefialado, estalló de rabia: - jPequefia zorra! j Te atreves a calumniarme! jSoy tu hermano! -iBah! -escupió Luciana con disgusto- . jQué clase de hermano! - Desde pequefios, mamá siempre te favoreció, siempre tuviste lo mejor para comer y vestir, y aun así me ---- maltrataste. (Cuándo me trataste como a una hermana? - Ahora que mamá no está, sigues como un vampiro, comiendo y gastando lo mío. jNo tengo un hermano como tú! Luego, volvió a dirigirse a Diego, sollozando: -PbDiego, tienes que creerme, él me obligó a hacerlo... -HMis sentimientos por ti son sinceros, jte amo de verdad! -iEn serio? - Diego sonrió fríamente, sus palabras carentes de toda emoción-. Luciana, éme tomas por idiota? -Engafiándome una y otra vez, jparece que están cansados de vivir! Hizo un gesto a los guardaespaldas: - jVengan aquí y rómpanles las piernas a los dos! - iQué? Los hermanos Mendoza emitieron gritos de terror, que pronto se convirtieron en aullidos de dolor. -PDiego, Diego... jno puedes hacerme esto! jAah! Solo cuando las extremidades inferiores de ambos ---- quedaron ensangrentadas e incapaces de sostenerse, Diego relajó ligeramente el cefio. - Recuerden, jeste es el precio por lastimar a Sofi! Luciana, tumbada en el suelo, derramaba sangre y lágrimas. Nunca pensó que Diego pudiera ser tan despiadado. No pudo contener su ira y le gritó: - jDiego, éte crees que eres mejor?! - Deja de actuar como si amaras tanto a Sofía. - Si realmente la amaras tanto, ícómo pudiste acercarte a mí? éCómo pudiste hacerla sufrir día tras día? -iEstás enfermo de la cabeza! El rostro de Diego se ensombreció instantáneamente. Se inclinó y agarró con fuerza su barbilla, rechinando los dientes: - Qué has dicho? Luciana mostró una sonrisa desesperada: -Diego, tú lo sabes bien. - aAntes Sofía te amaba tanto, pero tú la despreciabas por amarte demasiado, por querer estar siempre contigo, jpor no darte libertad! ---- -REllalo perdió todo por ti: su identidad, sus amigos, su vida social. - éY tú? áNo fuiste tú quien la Ilamaba molesta y le decía que se fuera, quien no se preocupaba por ella en absoluto? La voz de Luciana temblaba de dolor, pero sus palabras eran despiadadamente certeras: -PDiego, lo que te está pasando ahora, jes tu karma! El hombre frente a ella comenzó a temblar. Luciana sabía que había dado en el blanco. Después de un largo momento, Diego volvió a abrir los ojos. Lanzó una última mirada a los hermanos Mendoza y se dirigió a los guardaespaldas sin emoción alguna: -Arrójenlos a la montafia nevada. -iTodo el sufrimiento que Sofi experimentó, ellos deben probarlo exactamente igual, sin faltar nada! Discover our latest featured short drama reel. Watch now and enjoy the story!
