---- Capítulo 5 Al ver la expresión seria de Alfredo, no pude evitar reír a carcajadas. Él, sin investigar la verdad, ya me había considerado como la culpable, éy ahora decía que me protegería en el futuro? - Alfredo, no necesito la protección de nadie. No soy la culpable del incendio. Si quieres, investígalo. Dicho esto, estaba a punto de irme, pero é| me apretó la mufieca con más fuerza. Sus ojos mostraban confusión y cansancio, como si estuviera vacilando en defenderme o no. -2Yano eres una nifia. éPor qué sigues siendo tan inmadura? Violeta es mucho más considerada que tú ... En ese momento, Violeta me estaba mirando con rencor. Tan pronto como escuchó las palabras de Alfredo, su expresión se torció en la de una víctima: - Alfredo, si piensas así, puedo perdonarla por ti... No la denunciaré, pero realmente tengo miedo de que vuelva a hacer más locuras... Les prometiste a mis padres que nunca permitirías que nadie me lastimara, iverdad? Me detuve a observarlos. Cuando ella volvió a mencionar a sus padres, la cara de Alfredo se tensó de nuevo. Al ---- final, tomó una difícil decisión: -PValeria, lo siento, no puedo permitir que Violeta sufra ninguna injusticia. Luego, se fueron juntos, y la puerta frente a mí se cerró de golpe, dejándome sola en la oscuridad. Así era mi marido, quien me prometió protegerme, pero luego me consideró culpable. Acababa de disculparse conmigo, y ahora me encerró en la sala de interrogatorio ... Qué ridículo, icierto? Estuve encerrada allí durante dos días enteros. Nadie me trajo agua ni comida. Sabía que eso era definitivamente obra de Violeta. Ella es hija de héroes, y todos tendían a considerarla la parte justa y preferían protegerla y cuidarla, incluso odiándome a mí, aunque yo no había cometido ningún error. Antes de perder el conocimiento por el hambre, los recuerdos de la vida pasada volvieron a mi mente. Primero, vi a Violeta caer deliberadamente hacia el tráfico. En ese momento, aún no conocía sus estrategias y simplemente pensaba que era solo una nifia que necesitaba nuestros cuidados. Al ver la escena, me quedé paralizada del susto y dejé caer la sopa que le había preparado. El líquido caliente salpicó y me quemó la pierna. ---- En el siguiente instante, Alfredo me aventó al suelo con fuerza, mientras que Violeta Iloraba desconsoladamente acusándome: -PValeria... épor qué me empujaste...? Aquel día, Alfredo, furioso, dio un fuerte golpe al árbol con su pufio. Las hojas caían llenas de polvo, lo que me hizo Ilorar. Intenté justificarme, pero él parecía no entenderme y solo me llevó a casa conduciendo a toda velocidad. Al Ilegar, me encerró en la habitación para que "reflexionara". iPor qué debería? jNo tenía ningún error! Lo único de que me di cuenta era que la "amistad" entre ellos había cambiado. Por más que yo llorara y protestara, é| simplemente se negaba a creerme. Pedí revisar las grabaciones de las cámaras de seguridad, pero él se fue de nuevo con un portazo. Antes de irse, me interrogó: -iLastimaste a Violeta! /Ahora quieres que ella piense que ya no confío en ella? Solo la trato como mi hermanita, éy no puedes aceptar ni una relación tan pura? Una gota de lágrima salió de mis ojos incontrolablemente. ---- Al siguiente instante, recordé otro día en que Violeta cayó a propósito de las escaleras. La cara de Alfredo se oscureció por completo y me miró con indiferencia: -iYa te dije que te mantuvieras alejada de ella! éPor qué lo hiciste de nuevo? Eres tan irrazonable ahora. Violeta, no tengas miedo. Te llevo al hospital ahora mismo. Dicho esto, la cargó sobre su hombro. Antes de irse, esta me mostró una sonrisa con desdén y sarcasmo. Ese día, empecé a tener la idea de divorciarme de él. No obstante, en el mismo día, me enteré de mi embarazo. Discover our latest featured short drama reel. Watch now and enjoy the story!
