Capítulo 36: Luna respira profundo para darse valor y le sigue el paso a Jack. Cuando se paran en la puerta del lugar, los padres de Jack se acercan a ellos, el primero en saludar es su padre, quien le da un fuerte abrazo a su hijo como puede, porque Jack no suelta a Luna. “Feliz cumpleaños, hijo… y esta Señorita tan hermosa”, dice. “Ella es Luna Walsh, padre… mi novia”, el rostro de Jason como el de su esposa, Sabrina, se desencajan por la sorpresa de ver a Jack nuevamente con una novia. “Mucho gusto, Señorita Walsh”, dice Jason. “El gusto es mío, Señor Gosling”, Luna mira de reojo a Jack, quien sonríe por esa pequeña broma interna. “Te presento a mi esposa, la madre de Jack…”, dice Jason. “No es mi madre”, dice Jack con ese tono frio que Luna le conoce perfectamente y se siente algo incómoda, especialmente porque la mujer la mira de una manera despectiva. “Jack…”. “No empieces con tus estupideces, ella es mi madrastra y su hijo bastardo no es mi medio hermano, es mi hermanastro”, contesta Jack. “¡Es mi hijo!”, espeta. “¡Pues no me consta!”, Luna le pone una mano en el pecho para que se calme, Jack cierra los ojos unos segundos y asiente. “Pero no es momento de esa discusión, ¿Verdad, padre? Hoy me estás festejando, estás celebrando que tu primogénito llegó al mundo hace veintinueve años”, dice Jack. Jack pasa por el lado de Sabrina sin mirarla siquiera, la detesta, porque él sabe lo que esa mujer es en realidad, la oportunista más grande del país, porque se metió en la cama de su padre mientras su madre aún estaba viva. Toman asiento, Luna sin soltarle la mano a Jack porque sabe que ante cualquier provocación reaccionará mal. “Y bueno, ¿Cómo se conocieron? Me imagino que en alguna convención de empresarios…”. “No, iba a contratar a Luna para un puesto importante, pero se negó. Es estudiante de cocina internacional y trabaja en la barra del nuevo bar de Zeus”, comenta Jack. “¡Ese trabajo es un horror!”, dice con escándalo Sabrina, llevándose las manos al pecho. “En realidad no lo es. Es un trabajo tranquilo y me sirve para manejar mis gastos”, le dice ella muy calmada y digna. “¿Tus padres qué dicen de tu noviazgo con mi hijo?”, Jason no está del todo contento, porque es un snob, pero como ve a Jack tan feliz, prefiere no hacerle un desaire, no todavía. “Mis padres murieron, Señor”, Jack le aprieta la mano y ella lo mira con dulzura. “¿No nos ofreces algo de beber? Pero nada sin alcohol, porque soy yo quien maneja”, dice Jack. “Sí, si…”. Mientras Jason ordena que le lleven algo de beber a la pareja, Luna le pide a Jack que le diga dónde está el baño para ir a refrescarse. Él la acompaña hasta el cuarto de baño y luego se regresa para discutir con su familia por ese recibiendo tan odioso, porque no le ha pasado desapercibido el gesto de Sabrina. Una vez sola en el baño, Luna se mira al espejo, agradece que sólo se maquilló un poco los ojos y los labios, así que se refresca las mejillas con el agua fría. Siente que le falta el aire y que todo lo que allí ocurre, es irreal. Esa familia es extraña, ahora entiende mejor que antes a Jack, no debió ser fácil para él crecer con un padre que es obvio no la quiere allí y con una mujer que sólo arruga la nariz cada cinco segundos. ‘Tú puedes…’, con esas palabras se infunde valor, sale de nuevo y camina a la sala. Pero antes de entrar se detiene, porque allí oye una voz que reconoce muy bien… “No puede ser…”, se dice incrédula. Oye a Jack decirle a su padre que no es su hermano, Luna cierra los ojos, se asoma y allí lo ve. “No… John…”. Sí, John, su exnovio… y el medio hermano de Jack. En ese instante, apoyada en la pared al lado de la puerta de la sala, Luna siente que el mundo gira muchas veces y demasiado rápido. De pronto, le falta el aire y siente que las manos le sudan, mira a todos lados como buscando a dónde escapar, pero no puede. Jack, que no quiere seguir discutiendo con su padre y sólo quiere largarse de allí, sale a buscar a Luna para salir a otro lugar y celebrar los dos juntos, pero en cuanto pone un pie fuera de la sala, se encuentra a la chica asustada y muy pálida. Sin preguntarle nada, la rodea con su brazo y se la lleva a una habitación aledaña, llena de trofeos y otras distinciones. La sienta en un pequeño sillón y se arrodilla frente a ella. “Luna, mi amor… ¿Qué te pasó?”, le dice colocando sus manos en sus mejillas para que lo vea a la cara. “Es él… tu hermano”, le dice Luna con apenas un susurro. “Medio hermano, hermanastro, conocido”, responde él, pero al ver que Luna no sonríe ante esa aclaración ni reacciona del shock, se asusta “Luna, ¿Qué pasa con el idiota de John?”, pregunta Jack. “Es… ¿Recuerdas a mi exnovio?”, le dice a Jack. Jack asiente y ve cómo se le acumulan las lágrimas en los ojos. “Es él… John, tu hermanastro, es mi ex”, confiesa Luna. Jack abre los ojos y se pone de pie pasando sus manos por su cabello. Si el destino quiere ser jodido, realmente a él le había tocado bastante feo. Mira Luna que tiembla nerviosa y siente odio por ese hombre quien hace unos días la intentó atacar. Intentó forzarla a algo que ella no quería, sin mencionar las cosas que le hizo antes, la manera en que la humilló y la dejó justo cuando Luna más lo necesitaba. Ahora sólo siente una rabia contenida, quiere partirle la cara, porque todas esas cosas que le dijo a Luna no tienen relación alguna con la chica. Aunque si algo debía agradecerle es que, todo eso hizo que él pudiese llegar a Luna. Retoma un poco el control de la situación y le dice con seriedad a Luna. “Quédate aquí mientras voy a partirle la cara a ese desgraciado”, Jack se gira para salir, pero ella lo toma del brazo y se aferra a su pecho. “¡Por favor, no lo hagas!”, pide Luna. “Luna, ese tipo te dejó cuando más lo necesitabas y hace una semana intentó propasarse contigo. ¡No puedo dejarlo que se quede así!”, exclama Jack. “No, por favor…”, ella deja salir un suspiro y se pasa las manos por el cabello. “Entiendo, es porque no quieres verlo, ¿Verdad?”, ella asiente levemente. “Bueno, de todas maneras, yo quería irme, esto se puso demasiado horrible, incluso antes de saber que ese es el desgraciado que te hizo sufrir tanto”, Jack le levanta la barbilla y la mira a los ojos. “Nena, si quieres irte sólo dímelo y nos vamos en este preciso instante sin siquiera despedirnos”, añade Jack. Luna lo mira unos segundos en silencio, comienza a pensar en todas las posibilidades. Lamentablemente, John es parte de la familia que Jack no quiere, y eso quiere decir que, aunque no lo desean, van a tener que estar cerca de ellos. Tampoco puede huir toda la vida de algo que es inevitable, así que sólo deja salir un suspiro y niega con la cabeza. “No, no quiero irme esta vez, no voy a huir. Puede que le haya dejado pasar lo que hizo hace unos días, pero… estoy segura de que si me ve aparecer contigo de la mano va a ser suficiente venganza, después de todo, ya me presentaste como tu novia”, dice Luna. Jack le dedica una mirada oscura y esa sonrisa siniestra que le dice que está totalmente de acuerdo con hacer aquello. En realidad, Jack está bastante complacido porque Luna ha tomado una decisión muy a su propio estilo, y eso en verdad lo cautiva, porque quiere decir que su mujer se está tomando muy bien su papel. “Muy bien, entonces, así lo haremos, preciosa”, Jack le toma la mano con fuerza, se la lleva los labios y la besa. Luego le deja un suave beso en los labios y salen de allí un poco más compuestos de la situación. Si a Luna le temblaban las piernas hace unos minutos, ahora se siente poderosa, porque puede darle en la cara a ese idiota y seguro que ahora no querrá acercarse para molestarla, porque debe tener claro de lo que es capaz Jack. Title: A Match Made in Heaven In "A Match Made in Heaven" by CrushReels, a spontaneous decision leads to an unexpected twist of fate. What begins as a flash marriage to a street vendor unravels into the revelation that he is, in fact, a billionaire CEO. The story follows a wealthy heiress who finds herself lost and betrayed by those closest to her, navigating through deceit and the dark intentions of others. As she grapples with the aftermath of betrayal by her boyfriend and the unsettling proposition from her foster parents to be sold off to an older man, our protagonist faces challenges that test her resilience and character. Amidst the chaos of her circumstances, she discovers an unlikely connection with the street vendor turned CEO, leading to a journey of self-discovery and unexpected romance. Set against the backdrop of modern romance, this ongoing tale delves into themes of trust, redemption, and the complexities of human relationships. "A Match Made in Heaven" stands out for its unique blend of serendipity and intrigue, offering readers a captivating narrative that defies conventional expectations. Experience the unfolding saga online at CrushReel and delve into a world where chance encounters pave the way for extraordinary love stories.