---- Capítulo 3 De repente, la puerta se abrió, era mamá. Abrí ligeramente la boca e intenté tomar de su mano. «Mamá, me siento fatal...» Sin embargo, ella solo me miraba indiferente, arrojando su celular en mi cama con fuerza. Enla pantalla, se reproducía un vídeo de lo que sucedió antes de que me desmayara. Al principio, estaba quieta, mirando la pared. De repente, empecé a golpear frustrada la pared con los pufios, haciendo que me saliera sangre, que goteaba al suelo. Cuando mamá me vio, me encontró golpeándome en la cara. En mis brazos ya se veían las marcas horribles de mordeduras. Mirabala pantalla con temor, porque no recordabalo que había ocurrido. - No sabía nada de eso... -murmuré. No sabía qué debería hacer, por lo que intenté buscar ayuda de mamá. Pero, ella solo sopló con desprecio: -Ya está todo normal al 1legar al hospital? Nieve tiene razón. jEsto es toda tu estrategia! Dicho esto, tomó su bolso de la mesa y se dio la vuelta, ---- mientras decía: - /Nieve quiere comer los cangrejos. Todos se fueron, y me dejaron sola desconsolada en el pabellón. Al día siguiente, cuando la enfermera vino a cambiarme el vendaje, el médico que me dio el examen psicológico también vino. -Lo siento mucho... Me volteé, tratando de no dejar que las lágrimas salieran. Escuché que ayer, cuando mis padres se fueron, hicieron un terrible escándalo en la consulta de este médico, difamándolo como un médico con mala intención. Pero é] seguía siendo aún amable conmigo, preguntándome si quería recibir tratamiento. No me volteé a mirarlo. Mordí mis labios con tristeza para contener el Ilanto. Sabía que no merecía esa amabilidad de nadie... a Las heridas no eran graves. En pocos días regresé a casa. La casa estaba muy animada porque ese día era el cumpleafios de Nieve. En realidad, también era mi ---- cumpleafios, pero nadie me recordó. Nieve nunca permitió que celebrara el cumpleafios con ella. De repente, papá me hizo sefias y me llamó: -iLluvia! jVente aquí de inmediato! Esbocé de inmediato una linda sonrisa por sorpresa. El pastel de cumpleafios era muy grande, mucho más grande que los de antes. Quizás recordaron que también era mi cumpleafios porque estaba herida. -THija, isopla las velas! -dijo mamá con una voz más suave de lo habitual. Cerré los ojos y apagué las velas frente a mí. Cuando abrí los ojos, los destellos volvieron a aparecer en mis pupilas. Esperaba los elogios de mamá. En el pasado, cuando Nieve apagaba todas las velas de un soplo, namá siempre la elogiaba por eso. Sin embargo, no hubo ninguno. Lo que escuché fue el grito agudo de Nieve: -iMal**ta! jQué has hecho! Me estranguló enloquecida, y casi clavó sus ufias en mi piel. No entendí sus acciones, y miré hacia papá y mamá. Al ---- ver su expresión un poco avergonzada, por fin entendí que el pastel no fue para mí. Mamá me apartó a un lado y volvió a encender las velas. -9Nieve, venga. Se agruparon alrededor de Nieve, mirándola con ternura y suavidad, mientras la luz saltando de las velas iluminaba su cara. Al instante en que las velas se apagaron, ella me miró con burla. Yo permanecí en mi lugar, como una extrafia en esta familia. Papá descubrió mi extrafieza y me dijo: -FLluvia, Nieve está de mal humor hoy. Te compraré un nuevo pastel, áde acuerdo? Resultó que todos recordaron que también era mi cumpleafios. Sabían que también estaba presente... En realidad, no me había gustado tanto el día. Cuando tenía cinco afios, los compafieros del jardín de infancia hablaban efusivos sobre cómo sus padres los llevaban a restaurantes o parques de atracciones en sus cumpleafios. Pero, en realidad yo nunca había estado en esos lugares, ni en los restaurantes ni en el parque de atracciones, mejor dicho, ni siquiera me habían celebrado el cumpleafios. ---- El día de mi cumpleafios de cinco fue mi primera rebelión. Yo también quería celebrar mi cumpleafios, por lo que apagué las velas del pastel junto con Nieve. Sin embargo, justo en ese preciso momento, mamá regresó y me quitó el gorro de cumpleafios con brusquedad. Reprendió a papá, acusándolo de haberme dejado celebrar mi cumpleafios. -IiElla necesita bailar! jcómo puedes dejar que coma pastel! Después de aquel día, cada vez que lIlegaba el día de nuestro cumpleafios, me ordenaban que me quedara en la habitación sola. Title: Committed In CrushReel's ongoing novel "Committed," a man, grappling with the pressure to propose to his girlfriend, finds himself at a crossroads when he unexpectedly encounters a runaway bride. Seeking an escape from his relationship's demands, he embarks on a journey to Greece where he crosses paths with the enigmatic former... Exploring themes of love, commitment, and serendipity, this modern romance delves into the complexities of relationships and the unexpected turns life can take. As the protagonist navigates between duty and desire, readers are drawn into a tale of opposites attracting amidst picturesque Greek landscapes. What sets "Committed" apart is its heartfelt portrayal of emotional conflict and the pursuit of true connection. Dive into this sweet romance that promises twists of fate and heartfelt revelations. Available to read online at CrushReel for those seeking a story that resonates with the beauty of unexpected encounters.
