---- Capítulo 4 Carlos sonrió y se ajustó los anteojos: -)Jorge, no seas tan formal. Llámame Carlos. -Aunque lamentablemente soy alérgico al alcohol, así que no podré beber contigo. Luego miró a Marcela bromeando: - Marcela sí que puede beber, ella tomará por mí esta noche. - No le hagas caso con eso de su alergia -protestó Marcela con un mohín-. De los tres, yo soy la que menos aguanta el alcohol. Los tres intercambiamos risas corteses. Llegada la noche, el departamento entero, unas quince personas, nos reunimos alrededor de la mesa entre brindis y alegría. Después de varias rondas, sentí ganas de orinar yme dirigí al bafho. Allí me encontré con Diego, el nuevo pasante, quien me miró sorprendido: - 2Oye Jorge, équé pediste que Carlos fue personalmente a recoger? ---- -iQue pedí qué? - pregunté confundido. -áNo lo sabes? Acabo de ver a Carlos ir hacia la entrada diciendo que iba a recoger un pedido tuyo. No había pedido nada, pero mantuve mi expresión neutral. Aunque el alcohol había entorpecido mis sentidos, después de tantas situaciones extrafias, mi intuición me decía que algo no andaba bien. Me apresuré hacia la entrada para ver si encontraba al repartidor, pero no había nadie. Era lógico, cuando yo trabajaba de repartidor, apenas entregaba un pedido ya estaba pensando en la siguiente dirección. Sin más opciones, revisé los basureros y encontré una pista: en la parte superior había una bolsa de delivery con mi nombre en la dirección de entrega. Al examinarla más de cerca, me sorprendí al reconocer el empaque de aquella tienda de artículos eróticos. El alcohol se me bajó de golpe. Carlos había hecho un pedido usando mi nombre, épero qué habría comprado? La bolsa vacía no me dio más pistas. Para no levantar sospechas, la tiré y regresé rápidamente a la mesa. -iJorge! éPor qué tardaste tanto? ;Estabas vomitando en el baiio? - me recibió Carlos efusivamente-. jLos jóvenes no pueden hacer trampa, ven, sigamos bebiendo! ---- - Me dolía el estómago, un poco de diarrea -sonreí forzadamente. Carlos siguió sirviéndome copa tras copa, pero yo estaba alerta. Fingía derramar la mitad al servir, otra parte al brindar, y bebía mal a propósito, así que apenas tomaba un sorbo. Después de varias rondas, simulé estar ebrio y me desplomé sobre la mesa. Carlos, quien demostró tener una resistencia notable al alcohol, mantenía su mirada aguda y su rostro sin cambios. Al verme aparentemente inconsciente, sacó una tarjeta de habitación y lamó a un empleado para que me ayudara a llegar al cuarto. Me tambaleé apoyándome en el empleado, manteniendo la actuación hasta entrar en la habitación. Para mi sorpresa, vi a Marcela en la cama, su ropa tirada por todas partes. Su cuerpo, con sus curvas perfectas, estaba casi completamente desnudo ante mí, retorciéndose en la cama como una serpiente, incapaz de contenerse. Una extrafia sensación de calor se apoderó de mi abdomen, y la claridad mental que había recuperado se desvaneció de nuevo en la confusión. ---- Mi razón me decía que debía irme, pero la intensa necesidad física me paralizaba. Marcela, claramente también afectada, tenía el rostro sonrojado, sus labios rojos se movían ligeramente, emitiendo gemidos que parecían una invitación. Una excitación sin precedentes me invadió, mi mente se quedó en blanco, solo quedaba un pensamiento, y mi mano se extendió lentamente hacia ella. Esa noche, experimenté un placer intenso, como nunca antes. Pero no me di cuenta de que, en la oscuridad, un par de ojos observaban todo con avidez. In the world of romance and intrigue, a twist of fate leads a heartbroken woman to mistake a CEO for an escort in a moment of vulnerability. As their lives intertwine, she finds herself embroiled in a tale of revenge and unexpected love. This modern romance delves into themes of betrayal, hidden feelings, and the allure of forbidden desires against the backdrop of a lavish mansion and high-stakes office drama. What sets this story apart is the delicate dance between two souls navigating the complexities of their burgeoning relationship amidst deceit and longing. Dive into a narrative that promises not just love but also the thrill of uncovering hidden truths and embracing newfound passion. Discover the world of "CEO Calls Me Sweetheart" on CrushReel, where every chapter unfolds with tantalizing twists and turns, waiting to captivate readers seeking a blend of sweet romance and modern allure. Available to read at CrushReel for those eager to embark on this journey of love and ambition.