---- Capítulo 25 Ivana quedó paralizada. Nelson... había muerto. Ese día, en el cementerio de Lumora, frente a la tumba, Ivana miraba la foto en blanco y negro de Nelson, con una mezcla de sentimientos difíciles de identificar. Jamás imaginó que, después de aquella despedida seis meses atrás, la próxima vez que lo vería sería de esa manera. Su madre, al notar la expresión en su cara, no pudo evitar hablar: -Tlvana, éme culpas a mí? -dijo con voz baja. -En su momento, Nelson sí te envió un mensaje. Dijo que si no aceptabas tener un hijo con él, rechazaría el tratamiento con células madre... Hizo una pausa. - Pero tú dijiste que no querías saber nada ni de su vida ni de su muerte. Por eso, fui yo quien decidió no contártelo. Si tienes que culpar a alguien, culpa a mamá. Ivana, finalmente reaccionando, le sonrió suavemente. -iMamá? éQué cosas dices? Tú fuiste muy clara en ese entonces. Fue mi decisión, no la tuya. ---- Isabela bajó la mirada, visiblemente conmovida. - Pero si yo te lo hubiera dicho en ese momento... - Hubiera sido lo mismo -interrumpió Ivana, sin pensarlo- .. Aunque lo hubiera sabido, no habría hecho nada para salvarlo. Su voz sonaba serena, pero firme. - Porque la vida de alguien no puede ser una cadena para atarme. Y así fue como Nelson cumplió su palabra. Después de que Ivana se negó a tener un hijo con él, también rechazó cualquier otra opción. No permitió que otra mujer le diera un hijo. No aceptó el tratamiento y, al final, no vivió ni seis meses más. Cuando Ivana se enteró de todo esto, no sintió ni culpa ni tristeza. Tal vez para otros, la decisión de Nelson hubiera parecido un gesto romántico, una prueba de amor incondicional. Pero para Ivana, no fue más que un chantaje cruel. Puede que Nelson sí la hubiera amado, pero el amor, cuando llega tarde, ya no significa nada. ---- Y usar su enfermedad para presionarla, para obligarla a tener un hijo, no por amor, sino por presión... Eso no era amor, era egoísmo. Incluso su muerte parecía tener la intención de dejar una sombra sobre ella, como si al irse quisiera encadenarla para siempre a su recuerdo. Ivana bajó la mirada y observó el rostro de ese hombre enlafoto. Sí, ese era Nelson. Siempre pensando solo en sí mismo, incluso en la muerte. Desde el día en que se fue, Ivana ya no volvió a sentir nada. Ni su muerte ni sus últimas palabras lograrían cambiar eso. Dio media vuelta sin mirar atrás. - Todos los bienes de Nelson... -dijo con frialdad- . Dónalos a una fundación. No quiero nada suyo. YElena... Cuando se enteró de que Nelson había muerto, 1loró por unrato, sí. Pero el mundo sigue girando, aunque el corazón esté roto. ---- Finalmente, encontró a un viejo millonario y se convirtió en su amante. No tuvo suerte: la esposa del anciano era una mujer despiadada. Le destrozó el rostro a golpes. Elena quedó sin futuro, sin salida, y poco después, murió sola y enferma. En ttan solo un afio, todo había cambiado. Las máscaras cayerony las deudas se cobraron. Ylavida, poco a poco, volvió a su cauce. Ivana también recuperó su libertad y su destino. A partir de ahora, el cielo sería más azul, el mar más profundo y su vida más brillante que nunca. In the world of romance and intrigue, a twist of fate leads a heartbroken woman to mistake a CEO for an escort in a moment of vulnerability. As their lives intertwine, she finds herself embroiled in a tale of revenge and unexpected love. This modern romance delves into themes of betrayal, hidden feelings, and the allure of forbidden desires against the backdrop of a lavish mansion and high-stakes office drama. What sets this story apart is the delicate dance between two souls navigating the complexities of their burgeoning relationship amidst deceit and longing. Dive into a narrative that promises not just love but also the thrill of uncovering hidden truths and embracing newfound passion. Discover the world of "CEO Calls Me Sweetheart" on CrushReel, where every chapter unfolds with tantalizing twists and turns, waiting to captivate readers seeking a blend of sweet romance and modern allure. Available to read at CrushReel for those eager to embark on this journey of love and ambition.
