---- Capítulo 18 Las palabras de Isabela dejaron a todos en completo silencio. Nadie se atrevió a mover ni un dedo. Elena fue la primera en reaccionar, visiblemente sorprendida, y con voz temblorosa preguntó: - ilIvana, tus padres adoptivos son la familia Lima? Isabela levantó la vista y, con voz firme, respondió: - Padres adoptivos? Ivana para nosotros es nuestra hija biológica. La frase cayó como una bomba, dejando a todos en shock. Los amigos de Nelson, que siempre se burlaban de Ivana, se quedaron completamente paralizados. El pánico se apoderó de ellos al darse cuenta de lo que realmente estaba pasando. éEsa "campesina", como ellos la Ilamaban, era en realidad la heredera de los Lima? Avergonzados, intentaron disculparse de inmediato: -Tlvana, lo que dijimos antes fue una tontería, no lo decíamos en serio. jNo te lo tomes a mal! - Sí, sí, por favor, no te enfades, entendemos que estás ---- en otro nivel, no nos guardes rencor, ébien? Ivanalos miró fijamente, frunciendo el cefio, pero antes de que pudiera decir algo, su madre adoptivalos interrumpió con una fría mirada: -Las personas que cometen errores deben asumir las consecuencias. (Acaso no les ensefiaron eso? El ambiente se tensó aún más con las palabras de Isabela, quien continuó sin mostrar la más mínima emoción en su rostro: - ZAhora, ustedes que ofendieron a Ivana, más vale que vengan a pedirle perdón en persona, y traigan a sus padres también. Luego, con una mueca de desprecio, miró a Felipe, Celia y Nelson: -Tlvana ha sido demasiado generosa con ustedes. Solo les canceló los contratos. Pero yo no soy tan amable... Ycon firmeza, agregó: - PQuiero verlos en bancarrota. Isabela no vaciló ni un segundo. Inmediatamente, actuó para destruir los negocios de los Ramos y los Braga. Sin su cadena de suministros, las dos familias cayeron en ---- picada. La familia Ramos, que había estado en la cima, ahora se tambaleaba al borde de la ruina. Felipe y Celia Ilevaban casi todos los días acampados frente al hotel, esperando ver a Ivana, buscando apelar al "vínculo de sangre" con la esperanza de que ella se apiadara de ellos. Pero sus padres adoptivos no les permitían ni acercarse a ella. Nelson, por su parte, no estaba dispuesto a rendirse tan fácilmente. A pesar de que estaba haciendo todo lo posible para mantener a flote su empresa, se le notaba que cada vez le costaba más. Una tarde, agotado después de un largo día en la oficina, salió y se encontró con Elena esperándolo frente al edifício. -iNelson! -exclamó ella mientras corría hacia él, los ojos llenos de lágrimas - . Mis papás no me hablan desde hace días, no sé qué hacer... Solo me queda venir a buscarte. Claramente, Felipe y Celia estaban demasiado ocupados intentando salvar lo que quedaba de sus propios intereses como para preocuparse por ella. Nelson, visiblemente cansado, la miró y le respondió ---- con tono agotado: -iY qué quieres que haga? Elena, con el rostro preocupado, le contestó: - Quiero que me des una respuesta - su tono de voz ya reflejaba incertidumbre-. No me digas que ahora que sabes que Ivana es de la familia Lima, solo te importa ella y me dejas a mí de lado... -iCuándo vas a divorciarte de Ivana? - preguntó, su voz llena de temor. Elena no podía esconder su miedo. Pensaba que si Ivana quedaba fuera de escena, todo lo que ella deseaba sería finalmente suyo. Pero no contaba con que los padres adoptivos de Ivana fueran tan poderosos. Y ahora que ni siquiera sus propios padres le prestaban atención, si Nelson también la dejaba, estaría completamente perdida. Al escuchar la palabra "divorcio", la expresión de Nelson cambió de inmediato. Su rostro se tornó serio y tenso. - Todavía no me he divorciado oficialmente de Ivana. ---- No hables de eso tan a la ligera. Dicho esto, intentó darse la vuelta para marcharse, pero Elenalo detuvo con un sollozo. -iClaro! jEres igual que ellos! jTú también solo ves lo que hay detrás de Ivana! jTe importa más su apellido que a mí! éY las promesas que hiciste antes de casarte con ella? iYa se te olvidaron? - éY todo lo que esperé por ti, tambiénlo tiras a la basura? -iY qué hay de aquella vez en el coto de caza? iNo recuerdas quién te rescató de ese acantilado? Elena no podía dejar de Ilorar, su voz estaba llena de desesperación. Nelson sintió una punzada de culpa, pero al Ilegar a esa última frase, algo en su interior se detuvo. Se quedó paralizado. La miró fijamente a los ojos, confundido: -iQué dijiste? éTú me sacaste del fondo del acantilado? Elena, con los ojos hinchados, asintió lentamente. -éQué tiene de raro? Nelson frunció el cefio, tratando de recordar. ---- - Pero... yo recuerdo haber despertado en una cueva. 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