---- Capítulo 7. Los ojos de Salomé se abrieron desmesuradamente. - éDe qué estás hablando? jLuis, éhas perdido la cabeza?! jYo soy tu compafiera! ;Cómo pudiste traicionarme así? Luis rio, pero fue un sonido breve y amargo. -i Compafiera? Salomé, ni siquiera completamos el vínculo del alma. éDe qué traición hablas? -FLuis... -la voz de Salomé temblaba. Él la interrumpió. -Siempre has sabido que no te amo de verdad. Y yo solo me mentía a mí mismo, pensando que con el tiempo olvidaría a Elena. Se volvió hacia mí, con los ojos Ilenos de remordimiento. - No fue hasta hoy, al verte con alguien que realmente te ama, que entendí lo que perdí. Elena, he extrafiado mucho a mi verdadera luna. El rostro de Salomé se torció de rabia. - iMe traicionas por ella? -FLuis, no olvides que sin el apoyo de los Castro, mi familia, tu manada no es nada. jSi te atreves a venderme, lo lamentarás toda tu vida! ---- Luis la miró, y el último vestigio de calidez en sus ojos desapareció. - iMe estás amenazando? Salomé, éde verdad crees que no sé lo que has estado tramando todos estos afios? El rostro de Salomé palideció por completo. En ese momento, varios hombres lobo con el uniforme del Consejo de Ancianos entraron en el vestíbulo. El anciano líder evaluó la escena y habló con gravedad. - Hemos recibido un informe de que alguien ha acusado falsamente a la Luna del Rey Alfa. Vinimos a llevarnos a las partes implicadas para una investigación. Al ver alos miembros del consejo, la última esperanza de Salomé se desvaneció. -iNo iré con ustedes a ningún lado! -Gritó histérica- . iEn qué se basan? jSoy la heredera de la familia Castro! El anciano la miró con frialdad. - Precisamente por tu estatus especial se requiere una investigación más exhaustiva. Si se te declara culpable, serás despojada de tu condición de loba y serás exiliada a las tierras yermas. Al oír "exiliada a las tierras yermas", Salomé se derrumbó por completo. Era el castigo más cruel para un hombre lobo, una sentencia a morir sola en la naturaleza. ---- -iElena! - De repente, se lanzó hacia mí-. jTelo suplico! Por la amistad que una vez tuvimos, por favor, perdóname esta vez. jMe equivoqué! jSé que realmente me equivoqué! Daniel intervino de inmediato, poniéndose frente a mí y lanzando a Salomé hacia atrás con su dominio Alfa. -Si tocas a mi compafiera, morirás. Los miembros del consejo rápidamente sujetarona Salomé e, ignorando sus gritos, la arrastraron lejos. Con Salomé fuera de escena, Daniel se volvió hacialos Alfas presentes. - Espero que hayan visto lo que pasó hoy, porque a partir de este momento, la Manada Luna de Medianoche jamás formará una alianza con Luis Vera, ni con su manada, y cualquier manada que trabaje con ellos también será considerada nuestra enemiga. Esa declaración fue una sentencia de muerte para Luis, ya que al no tener posibilidades de aliarse con manadas importantes, su propia manada jamás crecería. Los Alfas en la sala expresaron rápidamente su apoyo. -iApoyamos plenamente la decisión del Rey Alfa! -iLas acciones de la manada del Alfa Vera fueron completamente inapropiadas! ---- -iRomperemos todos los lazos y vínculos con ellos! Al ver a todos sus aliados abandonándolo, Luis cayó en la desesperación y se lanzó hacia mí, imprudentemente. -iElena! jTe lo suplico! Por el amor que alguna vez compartimos, dame una oportunidad. jRenunciaré a todo mientras vuelvas conmigo! jIncluso si tienes que romper tu vínculo con el Rey Alfa, yo esperaré por ti! Sus palabras enfurecieron por completo a Daniel. - Estás pidiendo la muerte? Una ola arrasadora de dominio Alfa golpeó a Luis como un tsunami. Esta vez, Daniel no se contuvo. Luis fue lanzado hacia atrás, chocando con fuerza contra una pared y escupiendo sangre. - Daniel - toqué suavemente su brazo- , eso es suficiente. Adrián sigue aquí. Calmado por mi toque, la furia de Daniel se disipó. Pero cuando vio a Luis, sus ojos seguían lIlenos de intención asesina. - Si te atreves a codiciar a mi compafiera otra vez, la próxima vez tomaré tu vida. Con eso, me levantó en brazos en posición de ---- cabestrillo, ignorando completamente las miradas atónitas de todos a nuestro alrededor. - Nos vamos a casa. -Susurró en mi oído. Pero al segundo siguiente, su voz bajó a un ruido bajo y peligroso. - En cuanto a esta pequefia aventura tuya, saldaremos esa cuenta en la guarida. Esta noche,. sanción será doble. Mi rostro se sonrojó y le susurré al oído. - jEl nifio sigue aquií! Daniel rio. -Entonces hablaremos cuando esté dormido. In the latest episode of ReelTalk, titled "Queen Bee Meets Queen Bee," the infamous Daniela Couso reunites with Sarah Moliski for a buzzworthy discussion. Dive into the world of these legendary villains as they unveil the realities behind their captivating personas. 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